Infocefalia

Braquicefalia: Qué es y Tratamiento

La braquicefalia es una malformación congénita del cráneo que se caracteriza por una cabeza anormalmente plana en la parte posterior y ancha en la parte frontal.

Esta afección puede ser causada por varios factores, incluyendo una posición constante de la cabeza en los primeros meses de vida, una presión excesiva en la cabeza durante el parto, una posición anormal del feto en el útero o una fusión prematura de los huesos del cráneo.

Braquicefalia Qué es y Tratamiento

La braquicefalia puede provocar problemas estéticos y, en algunos casos, puede influir en el desarrollo cerebral del bebé si no se trata adecuadamente.

Los bebés con braquicefalia pueden presentar un retraso en el desarrollo motor y cognitivo, y en casos graves, la deformidad del cráneo puede impedir el crecimiento normal del cerebro.

La braquicefalia es una afección tratable, y el tratamiento depende de la gravedad del caso. Se pueden utilizar ejercicios para fortalecer los músculos del cuello y la cabeza, cambios en la posición del bebé durante el sueño, dispositivos de corrección como cascos, férulas o almohadas especiales. En casos graves, puede ser necesaria una cirugía para corregir la deformidad.

Tratamientos para Corregir la Braquicefalia

El tratamiento de la braquicefalia depende de la gravedad del caso y de la edad del paciente. Los tratamientos pueden incluir:

  • Cambios en la posición del bebé durante el sueño: Los padres pueden cambiar regularmente la posición del bebé para evitar que la cabeza siempre esté en la misma posición.
  • Ejercicios y terapia física: Los ejercicios de terapia física pueden ayudar a fortalecer los músculos del cuello y la cabeza, mejorando la postura y el control de la cabeza del bebé.
  • Dispositivos de corrección: Los dispositivos de corrección como cascos, férulas o almohadas especiales pueden ser utilizados para tratar la braquicefalia. Estos dispositivos aplican presión en las áreas de la cabeza donde se necesita para ayudar a moldear la forma del cráneo.
  • Cirugía: En casos graves y poco comunes, la cirugía puede ser necesaria para corregir la deformidad craneal.

Es importante recordar que cuanto antes se inicie el tratamiento, mayores serán las posibilidades de éxito. Si se sospecha de una braquicefalia, es importante acudir al pediatra para obtener un diagnóstico y plan de tratamiento adecuado.

En algunos casos leves, la braquicefalia puede corregirse sola a medida que el niño crece y los huesos del cráneo se expanden naturalmente. Sin embargo, en casos moderados a graves, la corrección no es probable que ocurra por sí sola, y es posible que se necesiten medidas terapéuticas para corregir la deformidad craneal.

Grados de Braquicefalia

La braquicefalia se puede clasificar en tres grados según la gravedad de la deformidad craneal:

Braquicefalia Leve

En este grado, la deformidad craneal es muy sutil y no suele ser visible a simple vista. Puede pasar desapercibida en algunos casos y no afecta la salud del niño. Es posible que no se requiera ningún tratamiento para corregir la deformidad craneal.

Braquicefalia Moderada

En este grado, la deformidad craneal es más evidente y visible. La cabeza puede tener una forma más plana en la parte posterior, con un leve desplazamiento hacia atrás en la línea del cabello. Puede haber un ligero desplazamiento de las orejas y la frente puede parecer un poco más ancha de lo normal.

Braquicefalia Moderada

En algunos casos, puede haber una asimetría facial leve. En este grado, puede ser necesario un tratamiento como ejercicios físicos, terapia física o el uso de un casco para corregir la deformidad.

Braquicefalia Grave

En este grado, la deformidad craneal es muy evidente y puede ser severa. La cabeza puede tener una forma muy plana y ancha en la parte posterior, con una protuberancia evidente en la zona occipital.

La frente puede parecer muy ancha y las orejas pueden estar significativamente desplazadas hacia atrás. En algunos casos, puede haber una asimetría facial pronunciada. En este grado, puede ser necesario un tratamiento más agresivo, como el uso de un casco personalizado y/o cirugía para corregir la deformidad craneal.

Es importante recordar que cada caso es único y que la gravedad de la braquicefalia puede variar en función de cada niño. Si sospechas que tu hijo puede tener una deformidad craneal, es importante buscar la opinión de un pediatra o un especialista en rehabilitación para obtener un diagnóstico y plan de tratamiento adecuado.

¿Cuáles son sus Consecuencias?

La braquicefalia puede tener diversas consecuencias dependiendo de la gravedad de la deformidad craneal y de si se trata o no. Algunas de las consecuencias posibles son:

  1. Problemas estéticos: La braquicefalia puede alterar significativamente la forma de la cabeza y de la cara, lo que puede generar problemas estéticos y afectar la autoestima del niño.
  2. Problemas de salud mental: Algunos niños con braquicefalia pueden experimentar problemas de salud mental, como ansiedad o depresión, debido a su apariencia física y a las posibles burlas o críticas de otros niños.
  3. Problemas de desarrollo cerebral: En casos severos, la braquicefalia puede afectar el desarrollo cerebral del niño si la deformidad craneal comprime el cerebro en crecimiento.
  4. Problemas de audición y visión: La braquicefalia puede afectar la posición de los oídos y los ojos, lo que puede provocar problemas de audición y visión.
  5. Dificultades motoras: En algunos casos, la braquicefalia puede estar asociada con dificultades motoras debido a la presión que ejerce la deformidad craneal sobre el cerebro y las estructuras cercanas.

Es importante destacar que no todos los niños con braquicefalia experimentan estas consecuencias y que la mayoría de los casos pueden corregirse con tratamiento adecuado. Por lo tanto, es fundamental buscar atención médica si se sospecha de una deformidad craneal para prevenir posibles consecuencias a largo plazo.

Contacto

¿Tienes alguna pregunta o quieres dejar algún comentario?